El cable de cabrestante es ligero a la par que duradero, es fácil de sujetar y es universal para adaptarse a la mayoría de los cabrestantes. El cable de nailon es lo suficientemente ligero como para flotar en el agua. La técnica de tejido fino garantiza un estiramiento mínimo y sin rotación. Además, cuenta con una gran resistencia a los rayos UV y los productos químicos. Por ello, funcionará de forma fiable y uniforme en condiciones severas. Es hora de actualizar su cabrestante con un cable sintético más fuerte que los cables de acero tradicionales. Evite el sobrecalentamiento, el deslizamiento, las superficies ásperas o afiladas.
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